Diego Hernández, director de Sistemas de Información de FNMT; Jesús S. Cano, jefe de informática del Tribunal Constitucional; Nacho Santillana, director de sistemas del Ayuntamiento de Barcelona; Julia Serrano, directora digital operation service de Inetum; José Manuel Petisco, Iberia general manager de Veritas y José Ángel Cortijo, responsable de Administración Pública de Nutanix, se unieron en un encuentro organizado por Byte TI y Adjudicaciones TIC para hablar de la situación del centro de datos en la Administración.
Fue Diego Hernández, director de Sistemas de Información de FNMT quien explicó la situación vivida en su departamento al inicio de la pandemia: “Nosotros nos dedicamos a hacer certificados para el ciudadano. Tuvimos una pequeña bajada en lo que a petición de certificados se refiere, pero a partir del 22 de junio tuvimos un crecimiento exponencial: de 8 millones se pasó a algo más de 10 millones. No es lo mismo llegar a una transformación digital desde una empresa privada, donde hay menos restricciones que desde una AAPP. En la Administración tenemos muchas restricciones y debemos cumplir muchos procedimientos. Además, contamos con el problema de que vamos a hacer algo nuevo por lo que al personal hay que darle formación. La subcontratación en firmas digitales, además, es complicada por lo que tenemos que dotarnos de nuestro propio personal. A veces, resulta difícil entender que desde la Administración podamos llegar a proyectos que están en auge. Si hablamos de la nube nos encontramos con restricciones: queremos una nube en el ámbito público para dar un mejor servicio a los ciudadanos”.
José Ángel Cortijo, responsable de Administración Pública de Nutanix, explicó que su compañía “siempre ha intentado que lo que hace la nube pública lo haga la nube privada. Para ello, hay que renovar el centro de datos. Nuestro software puede hacer esto. La renovación pasa por cuatro fases: modernizar la infraestructura; automatizar los procesos; la infraestructura debe ser fiable y la nube privada tiene que juntarse con la pública, porque el estado ideal es la hibridación. Además es necesario securizar el entorno y dar continuidad al negocio”.
Nacho Santillana, director de sistemas de la información del Ayuntamiento de Barcelona explicó que “estamos cambiando de un CPD onpremise a uno en cloud. Y en esta transición aparece el tema de la revisión de las autorizaciones que afecta a personas y departamentos en el momento en el que cambia la forma de trabajar. Además, en el momento en que vas a la nube, pueden cambiar las obligaciones y autorizaciones así como las responsabilidades de los usuarios. También hay que revisar la gestión de las incidencias que se hacen de forma diferente. Otro más es la clasificación de éstas. Los procedimientos de acceso vía perfiles también hay que modificarlos… Además, en el caso de que se pase de un CPD a la nube realizamos una nueva auditoría tanto de infraestructura como del entorno, aunque no se nos exija. Creemos que la computación en la nube puede incrementar los riesgos sobre los datos personales y ahí tendremos que decidir entre una nube privada, pública o híbrida. Es decir, el estado de nuestro data center se resumiría en que toca hacer revisión de prácticamente todo todos los días”.
Por su parte, José Manuel Petisco, Iberia general manager de Veritas, explicó que “nosotros nos centramos en la gestión del dato. En una plataforma de gestión del dato para todos nuestros clientes. Para nosotros la transformación digital es un viaje continuo que nos tenemos que plantear cada uno de nosotros. Los retos que vemos en Veritas son tres: primero, el coste. Hay que amoldarse a los presupuestos para hacer lo que queremos hacer. En segundo lugar está el viaje al cloud, cómo lo vamos a hacer, si vamos a estar en cumplimiento con la normativa y finalmente, el apartado de la la seguridad y nosotros somos una compañía especializada en la protección de los datos de nuestra plataforma. Por otro lado, en cuanto al coste nuestra plataforma permite analizar donde residen los datos, lo que proporciona un ahorro de costes, también si los gestiono en la nube o en onpremise. Otro apartado importante de la plataforma es la protección del dato. A veces no hay más remedio que tirar del backup que es algo absolutamente crítico y tiene que garantizar la inmutabilidad del dato: de nada sirve que los datos del backup se hayan visto afectados. Por eso tiene que ser automatizado y ayudado por herramientas de IA”.
Jesús S. Cano, jefe de informática del Tribunal Constitucional, explicó que en su departamento, “hace un año se vivió una crisis que no sólo fue sanitaria. La organización se resintió y vivimos un periodo donde los plazos judiciales se suspendieron, pero no la actividad del TC. Hemos conseguido salvaguardar el trabajo. Implementamos medidas de transformación de emergencia. La transformación del CPD es la vacuna para los próximos retos que aparezcan. Vienen necesidades nuevas, que pretenden hacer más resiliente al Tribunal. En nuestro caso, la transformación del CPD va de la mano de la transformación del puesto de trabajo. El TC tiene que variar la forma de trabajar para saltar a la nube, por lo que previamente hay que probar. En este tiempo, uno de los problemas que tuvimos fueron las reuniones del Tribunal porque la seguridad era una de las prioridades, así que implantamos un entorno seguro para que los miembros pudieran debatir desde su casa. Además, nos hemos enfocado en la protección de datos. En febrero le dimos una vuelta de tuerca a la seguridad y tomamos una serie de medidas que nos valieran en el futuro. Ahora estamos valorando dar el salto a la nube híbrida. Hay servicios críticos que va a ser imposible que den el salto a la nube, pero lo que es el puesto virtual del trabajo es algo que se puede trasladar a una nube híbrida”
Inetum surge tras la adquisición de IECISA por parte de GFI. Julia Serrano, directora digital operation service de Inetum explicó que su compañía se centra en “cubrir la necesidad de reducir el coste que tienen los clientes. Somos más de 850 profesionales y podemos dar comunicación punto a punto a los clientes o incluso a nivel de CPDs. Cubrimos toda la capa tecnológica con lo que damos servicio a todas las necesidades que pudieran tener todos los sectores y clientes. El objetivo es eliminar la complejidad del centro de datos, que se simplifique su gestión, que sea eficiente y que esté todo unificado. Por eso, ayudamos a nuestros clientes a evolucionar hacia servicios industrializados y predictivos mediante la aplicación de innovación y de tecnologías habilitadoras como IA, Big Data o Machine Learning. Somos capaces de administrar nubes híbridas ya sea en nuestros centros de datos o en los del cliente porque hay clientes que no pueden o no quieren moverse del entorno onpremise, pero sí pueden ir a una solución híbrida que les permita estar preparados por si en algún momento quieren ir a la cloud. Además, optimizamos el rendimiento de sistemas y aplicaciones”.